LA TIERRA NO TIENE DUEÑO
Foto de Juan Pablo Barberám
RECITADO
Cuando lo miro al abuelo
siento un dolor en el alma
y un no se qué por adentro
mezcla de pena y de radia.
Quien Iba a decir que un hombre
que se brindó por su patria
llegue al final de sus días
tan pobremente y sin nada
Doblado en dos por los años,
parece que se achicara
le están sobrando las manos
grandotas pero sin nada.
Son manos encallecidas
de campesinos sin chacra
que sembraron mil promesas
y no cosecharon nada.
Hay!! juventud campesina,
testigo de mis palabras,
enderezarme este rumbo
de explotación y desgracia.
La tierra no tiene dueño
la tierra es mujer y basta
la tierra no es del que tiene
sino del que la trabaja.
Recitado
Su canto nunca cantado
le regaló a las calandrias
a lo enterró surco adentro
con su mejor esperanza .
Tal vez por eso mi canto
que me ha brotado del alma
se levante reclamando
la tierra que el tanto amaba.
Siempre prenso que era suya
la Tierra que trabajaba,
tal vez por eso y por hombre
ya fecundó su esperanza
Con tanto sueño enterrado
y tanta rabia aguantada
le están sobrando las manos
grandotas pero sin nada.
JULIAN ZINI
Sacerdote, poeta, autor y compositor, Julián Gerónimo Zini, nació en el paraje “El Centinela”, Departamento Ituzaingó (Corrientes) el 29 de septiembre de 1939. Vivió su infancia en el “Paraje Cambaí”, (Monte Caseros – Corrientes), a orillas del Rio Miriñay, antiguo puesto de las Reducciones Jesuíticas, siguiendo los pasos de su padre trabajador hortícola. Realizó estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Menor de la ciudad de Corrientes y los completó en el Seminario Mayor de La Plata (BA). En 1963 se ordenó como Sacerdote. Radicado en la ciudad de Mercedes en la década del 70, se relacionó con jóvenes artistas de la región como José Ramón Frette, Carlitos Núñez, Joaquín Sheridan y Julio Cáceres, con los que formó su primer conjunto “Los Hijos del Pay Ubre”. En esta etapa ven la luz sus primeras composiciones. Con la incorporación de Tito Gómez, “Los Hijos del Pay Ubre” graban para el sello “Azur” un disco “larga duración”, el que nunca llegó a editarse por el contenido de las letras de Zini. Posteriormente, el grueso de su obra autoral integra el repertorio de dos renombrados conjuntos chamameseros, “Los de Imaguare” y el “Grupo Reencuentro”. Julián Zini se dedicó intensamente a la investigación de nuestro género y la religiosidad de su pueblo, trabajos
que ven la luz en libros como “Camino al Chamamé”, “Ñande roga”, “El árbol de nuestra identidad”, “Memoria de la Sangre”, “Ñandé Roga”, “La Pura y Limpia Mamá Ama de Itatí”, “La Cruz Gil”, “Ñandé Rekó”, “Pueblo Arandu” y “Chamame un modo de ser”. En la década del 90 formó su propia agrupación “Julián Zini y Neike Chamigo”, donde estuvo acompañado en actuaciones y grabaciones por músicos como Rosita Leiva, Pochi Base, Martín Barbona, Antonio Alvarez y Kingo Buscaglia, entre otros. Inspirado y prolífico compositor, llevan la firma de Zini obras como “Cambá Violín”, “Tierra Prometida”, “Mi Niño Chiquito”, “Flores del alma”, “Compadre que tiene el vino”, “Neike Chamigo”, “Avío del alma” y sus obras más difundidas, “Niña del Ñangapiri” y “Nuestros sueños y la distancia”. En el año 2005 recibió el “Tributo a la Trayectoria” en el campo de la Cultura Popular en el Senado de la Nación Argentina. Animador permanente de los principales festivales del Litoral y del gran Buenos
Aires, Zini tuvo la oportunidad en 2016 de presentarse en el “Festival del Folklore de Cosquín”
(Córdoba). Julián Zini falleció en Corrientes) el 16 de Agosto de 2020. Fuente: Fundación Memoria del Chamamé. |
